Un grave escándalo de lobby ha sido descubierto en Bruselas después de que uno de los altos funcionarios de la Comisión Europea se viera obligado a dimitir por su implicación en un proceso de tráfico de influencias. La industria tabacalera afirmó que un grupo de presión relacionado con el Comisario de Salud, John Dalli, le solicitó decenas de millones de euros a cambio de influir en la directiva europea sobre consumo de tabaco. Con la nueva legislación sobre tabaco, se teme que Dalli haya podido caer en la trampa de la industria tabacalera, diseñada para retrasar las restricciones sobre consumo de tabaco, no deseadas por ésta.
El problema es que nadie sabe qué pasó realmente porque la Comisión Europea se niega a hacer públicos los hechos. No admiten que el escándalo ocurrió porque las actuales normas de la UE sobre los contactos con los grupos de presión, son demasiado débiles.
Ayúdanos a limpiar el humo y exigir unas normas para una mayor transparencia del lobby, ahora:
Carta a Barroso sobre el escándalo Dalli (enviada por ALTER-EU el 5 de Noviembre de 2012)